Hasta aquí hemos visto que es la excelencia, pero ¿cómo podemos alcanzar la excelencia? ¿Qué caracteriza a aquellos que reconocemos por su excelencia? ¿Qué los diferencia de los que no son considerados de excelencia?. Según Daniel Mordeki (2013), los factores que producen la excelencia son básicamente tres: Capacidad, pasión y compromiso.
El primer elemento para ser excelente es poseer la capacidad para realizar la tarea o la labor que nos corresponde desarrollar. Un profesor de excelencia debe tener las capacidades para hacer que sus alumnos aprendan, para ello debe motivarlos e involucrarlos en el aprendizaje. Además, de innovar y disponer de variadas estrategias de enseñanzas de manera de asegurar que todos los estudiantes aprendan. Esta capacidad de enseñar debe ser algo innato, no es posible la excelencia docente si se carece que la capacidad de enseñar.
La excelencia constituye una opción que como profesionales de la educación debemos tomar, esta constituye una opción demandante y desafiante que requiere mucho esfuerzo, mucho ejercicio, mucha lectura y conocimiento por ello es necesario tener pasión por la docencia. La pasión constituye el combustible para avanzar, es la energía que nos permite movilizarnos díariamente, la fuerza interna que nos ayuda a levantarnos cuando nos hemos sufrido alguna caída, es la voz que nos anima para recuperarnos de la derrota.
El desarrollo de la excelencia debe ser una acción de cada día, no puede ser un esfuerzo aislado, sino que debe ser cosntante a lo largo del desarrollo de nuestra profesión, pero para que ello ocurra debemos asumir un compromiso irrenunciable “a recorrer hasta el fin todos los caminos que sean necesarios para obtener el mejor resultado posible”.
El compromiso con la excelencia nos aportará la energía, motivación y dedicación para alcanzar todas las metas que nos hemos planteado, no cediendo jamás hasta alcanzarlas y plantearnos nuevas metas, aún más desafiantes.
El entusiasmo repentino no produce excelencia, solo la combinación de capacidad, pasión y compromiso nos permitirán lograr resultados excelentes.
La excelencia es una opción a la cual como organización hemos optado, ahora cabe hacerse la pregunta de manera individual, ¿Estoy dispuesto a ser un profesional de excelencia? ¿Estoy dispuesto a ser una persona reconocida por su excelencia? ¿Tengo la suficiente pasión y compromiso para embarcarme en el desafío de la excelencia? ¿Estoy dispuesto a realizar mi aporte para que este colegio sea de excelencio? ¿Estoy dispuesto a realizar mi aporte para que cumplamos con ser una organización reconocida por la excelencia en la formación academica y valórica de nuestros estudiantes?